Una de las fases decisivas en los procesos de selección laboral es la entrevista de trabajo. Llegar aquí significa que has pasado algunos filtros y que tu perfil le interesa a la compañía a la que te has postulado. Este es el momento de dar a conocer la persona que eres, no solo el profesional que tiene las destrezas técnicas para desempeñar el trabajo, sino el ser humano que hay detrás, con sus actitudes, emociones y retos, que, según cómo los manejes, pueden representar un beneficio extra para las empresas.
¿Por qué son importantes las habilidades blandas en el contexto laboral?
Partiendo de que las habilidades blandas son el conjunto de capacidades y destrezas que te permiten interactuar y comunicarte con las otras personas, en el contexto laboral, son necesarias para enfrentarse a las situaciones que se presentan en el día a día, como trabajar con un compañero que no conoces, tolerar la frustración cuando tus ideas no son recibidas como esperabas o expresar con serenidad y respeto una opinión de desacuerdo, sin que ello implique que tus emociones se desestabilicen. Una persona conflictiva o con dificultades para tomar decisiones asertivas puede desgastar los equipos de trabajo, aun cuando sus habilidades duras o conocimientos técnicos sean superiores. Por ende, para las empresas, puede resultar más importante tener entre su equipo una persona flexible, con capacidad de pensamiento crítico, que esté abierta a los nuevos aprendizajes y que alinee su crecimiento personal con el crecimiento de la empresa.
La entrevista laboral es el escenario donde puedes y debes mostrar tus habilidades blandas
Es usual que antes de iniciar una entrevista laboral sientas que te estás jugando el todo por el todo porque, tal vez, no vuelvas a tener una oportunidad como esa y, por ende, te presionas para mostrar tu mejor versión. Sin embargo, podrías caer en actitudes sobreactuadas o poco creíbles que no causen una buena impresión.
¿Cómo mostrar, entonces, todo el potencial que hay en ti? Lo primero es ser conscientes de que la perfección no existe. No podemos desligarnos de nuestras emociones, pero sí conocerlas y gestionarlas para proyectar una imagen auténtica de quienes somos. Está bien aceptar que la entrevista te produce nervios y que eso no te resta valor, por el contrario, al normalizar lo que estás sintiendo consigues reducir la ansiedad para enfocarte en escuchar activamente a la persona que te está entrevistando.
Y es que una de las habilidades blandas más valoradas es la escucha activa. Cuando, en lugar de hacerle caso al pensamiento catastrófico o preparar respuestas impresionantes, concentras toda tu atención en lo que te están diciendo, muestras realmente tu actitud receptiva y puedes expresarte con mayor claridad y precisión.
La entrevista no es un casting de actuación, sino un diálogo que te permite mostrar tus habilidades blandas a través del lenguaje verbal y no verbal. Una de las claves para causar una buena primera impresión es la autoconfianza. Entra a la entrevista sintiendo la seguridad de que tienes la preparación necesaria para conseguir el trabajo y la disposición para mejorar los aspectos en los que no seas tan fuerte. Usa tus fortalezas a tu favor y habla de tus debilidades como una oportunidad para ser mejor. En este punto, puede que no te resulte tan sencillo reconocer cuáles son tus puntos fuertes y débiles, pero existen técnicas, como las que recomienda la career coach Evelyn Costa, que te permiten hacer ejercicios de autoconocimiento para ganar confianza y poder proyectar correctamente tus habilidades en una entrevista laboral de manera fluida y natural.
Liderazgo, proactividad, flexibilidad, inteligencia emocional y resiliencia son otras de las habilidades que vas a necesitar para desarrollar todo tu potencial, y hacerlo significa un esfuerzo, ponerte en marcha. Precisamente, en el taller Estrategias para el éxito profesional y lograr el trabajo ideal en EE. UU., que hemos diseñado con Evelyn Costa, puedes aprender a desarrollar tus habilidades blandas. Es una inversión que haces en ti y que no solo te sirve para acceder al trabajo de tus sueños, sino para la vida misma.